Introducción

La utilización de los perfumes con feromonas se ha popularizado en los últimos años como una alternativa para atraer al sexo opuesto. Se venden en distintas presentaciones y nombres comerciales, prometiendo aumentar la atracción sexual y la autoconfianza de quien lo utiliza. Pero, ¿realmente funcionan los feromonas en los perfumes? En este artículo revisaremos la literatura científica disponible acerca de los efectos de los perfumes con feromonas y su eficacia en la atracción sexual.

¿Qué son las feromonas?

Las feromonas son sustancias químicas que producen los animales y algunos insectos para comunicarse con otros individuos de su misma especie. A través de las feromonas, los animales pueden indicar su estado de ánimo, señalar el territorio, marcar rutas o, en el caso de los mamíferos, comunicar su disponibilidad sexual.

En los humanos, aún no está claro si existen las feromonas. Se han identificado compuestos químicos en nuestro sudor que podrían funcionar como feromonas, pero todavía no hay pruebas suficientes que confirmen su existencia en nuestra especie.

¿Cómo funcionan los perfumes con feromonas?

Los perfumes con feromonas se producen añadiendo a la fragancia natural de la colonia una pequeña cantidad de feromonas sintéticas. Según los fabricantes, estas feromonas sintéticas imitan la acción de las feromonas naturales y atraen al sexo opuesto.

Se cree que el receptor de las feromonas sintéticas es el órgano vomeronasal, una estructura presente en la cavidad nasal que se ha demostrado en animales que es capaz de detectar sustancias químicas relacionadas con las feromonas. Sin embargo, en los humanos la función del órgano vomeronasal es aún desconocida y no existe una evidencia sólida que demuestre su existencia en adultos.

¿Hay evidencia científica que respalda la eficacia de los perfumes con feromonas?

A pesar de la popularidad de los perfumes con feromonas, no hay suficiente evidencia científica que pueda respaldar sus efectos. La mayoría de los estudios realizados se han basado en una muestra pequeña de participantes, lo que dificulta la generalización de los resultados obtenidos. Además, en algunos de estos estudios no se han utilizado feromonas sintéticas sino extractos de sudor o lágrimas, lo que dificulta aún más la comparación de los resultados.

Evidencia positiva

Uno de los estudios más citados sobre los efectos de los perfumes con feromonas es el realizado por Cutler et al. (2003). En este estudio, se seleccionó un grupo de mujeres y se les pidió que evaluaran a hombres que habían utilizado una colonia con feromonas sintéticas. Los resultados indicaron que las mujeres encontraron más atractivos y masculinos a los hombres que habían utilizado el perfume con feromonas que a los que no lo habían utilizado.

En otro estudio, realizado por McCoy y Pitino (2002), se pidió a un grupo de hombres que utilizaran una colonia con feromonas mientras participaban en actividades sociales y se les comparó con un grupo que utilizó una colonia placebo. Los hombres que utilizaron la colonia con feromonas reportaron sentirse más atractivos y seguros durante las actividades sociales.

Evidencia negativa

Por otro lado, algunos estudios no han encontrado efectos significativos de los perfumes con feromonas en la atracción sexual. Por ejemplo, en un estudio realizado por Jacob et al. (2003), se pidió a un grupo de mujeres que evaluaran a hombres que habían utilizado una colonia con feromonas sintéticas. Los resultados no mostraron ninguna diferencia significativa entre los hombres que habían utilizado la colonia con feromonas y los que no.

¿Qué dicen los expertos?

La comunidad científica está dividida acerca de la existencia y la eficacia de las feromonas en los humanos. Algunos investigadores afirman que las feromonas son reales y podrían ser eficientes en la atracción sexual, mientras que otros sugieren que los efectos atribuidos a las feromonas en los humanos son más bien psicológicos que químicos.

La opinión generalizada entre los expertos es que se necesitan más investigaciones rigurosas acerca de las feromonas para confirmar su existencia y si funcionan en los humanos. Hasta que la evidencia científica sea más sólida, se debe tomar con precaución cualquier afirmación que prometa resultados espectaculares con los perfumes con feromonas.

Conclusión

En conclusión, aunque hay algunos estudios que sugieren que los perfumes con feromonas podrían aumentar la atracción sexual, los resultados no son concluyentes. No hay suficiente evidencia científica que respalde los efectos de los perfumes con feromonas en los humanos, y hasta que se realicen más investigaciones, es necesario ser cautos y no tomar las promesas de los fabricantes como verdades absolutas

Es importante recordar que la atracción sexual es multifacética, y no depende solamente del olor. La personalidad, el atractivo físico, la simpatía y la compatibilidad son factores que también influyen en la atracción sexual, y no pueden ser sustituidos por un perfume con feromonas.

• Referencias:
• Cutler, W. B., Genovese, M., Dimitrijevic, M., Seymour, L., & Preti, G. (2003). Sexual attraction enhancer for men: a randomized, double-blind, placebo-controlled study. Journal of cosmetic science, 54(3), 269-284.
• Jacob, S., Hayreh, D. J. S., & McClintock, M. K. (2003). Context-dependent effects of steroid chemosignals on human physiology and mood. Physiology & behavior, 79(2), 135-144.
• McCoy, N. L., & Pitino, L. R. (2002). The effects of a male pheromone on female attraction and mood. Journal of research in personality, 36(2), 276-284.